La Cultura no es responsabilidad de Recursos Humanos

En oportunidades he tenido reuniones con gerentes de recursos humanos que me han llamado para que los ayude a cambiar su cultura organizacional. Personas con muy buena voluntad que quieren hacer el bien a sus empresas. Pero la primera pregunta que les hago es «¿Cómo es tu gerente general?» Mi consultora puede hacer un extraordinario programa de cambio de cultura, pero si el gerente general no está totalmente convencido de la importancia del tema, es muy difícil que se logre.

El primer paso para cambiar es persuadir al gerente general de que la cultura es la base para la rentabilidad y ventas en el mediano plazo.

Y que los indicadores de cultura son tan importantes como los indicadores financieros a los cuales les presta toda su atención. Una forma  de hacerlo es mostrarle investigaciones serias que lo demuestran. Otra forma es hacer que converse con gerentes generales de otras empresas que manejan bien su cultura y él mismo se convenza. Otra forma es solicitarle hacer un piloto de un programa de cultura en alguna parte de su organización que trabaje de forma bastante independiente. Un área o unidad de negocios que tenga un gerente que le apasione la cultura. Pedirle al gerente general  que no bloquee la iniciativa por un par de años. Luego, que él mismo vea los resultados positivos.

Algunos gerentes después de todas estas experiencias se convierten y son evangelistas de la importancia de la cultura. Estos gerentes son usualmente aquellos que tienen buena conexión con las personas. Algunos otros aprueban la iniciativa, porque tiene lógica, pero su propia personalidad hace totalmente imposible que se pueda trabajar. Ellos dicen que quieren, que es importante, pero inconscientemente sabotean la iniciativa que en el fondo puede dejarlos en evidencia de su incompetencia en temas interpersonales.

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