Hoy las empresas conocen los beneficios de tener un clima laboral positivo, el instituto Great Place to Work se ha encargado de mostrar investigaciones donde la rentabilidad del negocio aumenta con un mejor clima laboral. Adicionalmente las investigaciones de la ciencia de la psicología positiva han demostrado que cuando estamos con afecto positivo, somos más creativos, aprendemos más, somos mejor evaluados y estamos más comprometidos con la empresa.
Personalmente, estoy convencido que estás investigaciones son correctas. Sin embargo, otros estudios, que muestran la utilidad de la emoción negativa o neutra han tenido menos difusión en nuestro medio.
Por ejemplo, cuando uno está feliz y con afecto positivo, tiene los beneficios mostrados anteriormente.
Pero se ha encontrado que nuestro optimismo nos puede hacer perder de vista algunos detalles que debimos tomar en cuenta antes de decidir.
Por otro lado, cuando estamos con un estado de ánimo positivo, tendemos a ser muy optimistas y podemos pensar que nuestro trabajo ha terminado, cuando todavía falta evaluar algunos otros escenarios. O quizás nuestro optimismo nos convence de que nuestra decisión va a funcionar sí o sí y no vemos potenciales peligros.
El miedo sin duda es una emoción que a nadie le gusta sentir. Pero el miedo moderado nos hace sospechar de la situación y nos ayuda a encontrar lo que podría ir mal en un proyecto y nos permite anticiparnos para corregirlo.
El miedo centra toda nuestra atención en el problema al frente, haciendo que nos concentremos mejor.
La tristeza también nos puede ayudar. Cuando estamos en un estado emocional de tristeza moderada, aumenta sustancialmente nuestra capacidad de concentrarnos en los detalles. Personas con una tristeza moderada, tendrán la capacidad de ver detalles que pueden ser cruciales antes de tomar una decisión.
La rabia, que pareciera una emoción totalmente destructiva, de una forma moderada nos puede ayudar. Sentimos rabia cuando un obstáculo se interpone en nuestro camino, o cuando vemos alguna injusticia o falta de respeto hacia nosotros o hacia los demás.
La rabia moderada nos da energías para enfrentar el problema y tratar de solucionarlo.
La sorpresa nos indica que algo inesperado ha ocurrido y que debemos prestarle atención inmediata.
Como pueden ver las emociones, positivas y negativas tienen una clara utilidad en la vida y los negocios. Lo que recomiendan los investigadores, es que es favorable tener un clima positivo, pero antes de tomar una decisión en un equipo o de preparar la presentación de un proyecto o de lanzar un nuevo producto, accedamos a todas las emociones para ayudarnos a tomar una mejor decisión.
La forma más fácil de ponerse en un estado emocional diferente es recordar alguna situación en el pasado que nos produjo esa emoción. Por ejemplo, si el grupo quiere tomar la perspectiva de tristeza, cada miembro recuerda alguna situación triste en el pasado y luego con este estado emocional, obtiene los beneficios de mirar el proyecto bajo un lente pesimista y ver detalles.
No le tengamos miedo a las emociones negativas, ellas tienen su utilidad en la vida. Más bien tratemos de aprovecharlas para nuestro beneficio.