Hoy esta de moda la palabra ágil, para algunos significa hacer las cosas más rápido para ser más competitivos.
Otros usan la palabra ágil para denominar todos los esfuerzos de transformación digital o de innovación de productos y servicios. Pero la realidad es que el concepto ágil es similar al concepto de equipos multifuncionales empoderados que ya tiene años de existencia, pero con dos conceptos añadidos importantes.
Además de ser un equipo multifuncional empoderado, el equipo ágil tiene como meta central al cliente. Es más en un equipo ágil, participa (no a dedicación completa) el cliente del proyecto a desarrollar. En segundo lugar, un equipo Ágil es incremental. En otras palabras el equipo multifuncional empoderado, debe presentar avances con cierta regularidad (semanal, quincenal, mensual) de algún elemento del proyecto terminado. Luego los clientes lo reciben y dan retroalimentación. En otras palabras, un proyecto de 6 meses se va presentando parcialmente y el equipo va corrigiendo en su curso en el camino.
Adicionalmente a esos dos cambios importantes, la agilidad trae una serie de herramientas que ayudan a ser más eficientes los equipos. Por ejemplo, una reunión diaria de 15 minutos donde las personas comparten lo que lograron el día anterior, lo que van a hacer el día de hoy y qué barreras enfrentan. Tiene además herramientas visuales para que todo el equipo pueda visualizar el avance del trabajo entre otras.
Es importante notar que los equipos ágiles no es la solución para todo. Su mayor utilidad se da cuando se requiere trabajar un proyecto con un objetivo claro. Todavía son necesarias hacer reuniones de gerencia para manejar el negocio en marcha. Lo triste es que empresas invierten mucho en formar equipos ágiles, pero sus comités de gerencia son totalmente lentos e interminables. Es importante que los comités de gerencia se modernicen usando metodologías innovadoras como Holocracia u otras para ayudar en la transformación de la organización.